jueves , 3 octubre 2024
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El perro solo puede sufrir de ansiedad

El momento de trabajar para que no sufra cuando se encuentre solo es cuando está con sus dueños.

La ansiedad por separación en perros puede convertirse no solo en un problema frecuente, también en una situación grave que debe ser resuelta para evitar el sufrimiento del animal y las consecuencias que puede ocasionar.

Mariano Strekir (*)

Especial para EL DIARIO

Seguro que has oído más de una vez: cuando me voy y dejo a mi perro solo, llego y encuentro que pasó un huracán por la casa, me rompió todo, los vecinos me cuentan que llora y aúlla por un largo tiempo. O también: cuando llego a casa, me encuentro que mi perro no comió ni tomó agua.

La ansiedad por separación en perros suele ocurrir cuando el humano o los humanos con los que el animal tiene más apego no están junto a él.

Esta alteración se manifiesta normalmente en forma de conductas inapropiadas y puede comenzar 20-30 minutos antes de la marcha del cuidador cuando el perro comienza a relacionar movimientos y sonidos con su partida. Sin embargo, otros perros sufren ansiedad por separación justo en el momento en el que sus cuidadores se van e incluso bastantes horas después.

La duración de los síntomas es variable, a pesar de que en la mayoría de los casos la ansiedad finaliza cuando el cuidador vuelve a estar en casa.

La dependencia obsesiva puede hacer que nuestro perro experimente miedos, inseguridades o fobias a la hora de quedarse solo. Acostumbrado a vivir en compañía, la ansiedad por separación puede aparecer en el animal cuando nos vamos de casa e incluso cuando nos ausentamos por unos minutos.

Los síntomas pueden variar. Sin embargo, algunos de los más frecuentes son los aullidos, los ladridos, rascar superficies o paredes, intentar escapar e incluso llorar o autolesionarse. Además, ausencia del apetito, sudoración excesiva, hiperventilación y anorexia.

Proponemos la siguiente clasificación:

a) Conductas destructivas: al quedarse solo, un perro con ansiedad por separación puede destrozar puertas, muros o ventanas en búsqueda de salidas para escapar. Es importante entender que el animal no lo hace como venganza sino como consecuencia de su alterado estado de nervios y ansiedad.

b) Sonidos excesivos: como ladridos, llantos e incluso aullidos; y,

c) Comportamientos no comunes: la ansiedad por separación puede llevar al perro a defecar u orinar dentro de la vivienda a pesar de que haya hecho sus necesidades en la calle minutos antes.

Razones

¿Por qué aparece la ansiedad por separación? El hecho de que en la actualidad los perros sean animales domésticos, ha provocado que tengan más dependencia de los humanos. Pero esto no es algo nuevo, la domesticación es un fenómeno presente a lo largo de miles de años y ha hecho que los perros desarrollen una predisposición a establecer vínculos de apego con sus dueños.

A continuación, veamos algunos motivos por los que un perro podría presentar este trastorno:

i) Hiperapego a su dueño: algunos perros son demasiado dependientes de sus dueños y esto causa fácilmente la aparición de la temida ansiedad por separación.

ii) Destete antes de tiempo: separar a los cachorros antes de las 8 semanas de la madre no es buena idea ya que pueden presentar mayores tendencias a padecer estrés por separación. Para un correcto desarrollo del cachorro éste debe estar hasta los dos meses con su madre y hermanos y de los 2 a los 4 meses tanto con su madre y hermanos como con personas para que haga una correcta sociabilización. Con los juegos en sus primeras fases aprenden a relacionarse, su posición dentro de la manada, a no sobrepasarse con los mordiscos jugando

iii) Experiencias traumáticas en solitario: si el perro se ha llevado algún susto mientras estaba solo puede desembocar en ansiedad por separación.

iv) Cambios de entorno: las mudanzas o una separación de los dueños puede desequilibrar al perro y dar pie a este trastorno. En general, cualquier cambio en sus costumbres o entorno afectará si no se hace correctamente y dando tiempo a que se habitúe; y,

v) Factores genéticos: no se sabe hasta qué punto los factores hereditarios pueden afectar a este tipo de trastorno.

Antes de nada, es importante comprender que el comportamiento de un perro con ansiedad por separación no se puede modificar cuando uno no está en casa sino cuando sí estamos.

Por ello, es fundamental seguir los consejos de un experto e implementarlos antes de abandonar el domicilio y al volver.

(*) Educador canino

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