Empate entre ambos conjuntos paranaenses, que buscan seguir acondicionandose para llegar con el mejor nivel a las competencias del 2023. Luego del encuentro, el y la entrenadora de cada equipo, brindaron declaraciones acerca de los objetivos para la temporada y sobre el estado de los planteles para afrontarla.
Luego de culminar el amistoso, tomaron la palabra los cabecillas de los cuerpos técnicos de Arenas y Palermo. Patricia Moyano y Lucas Giagnorio, detallaron cómo se encuentran los equipos que dirigen y hablaron sobre las competencias que los esperan en el corriente año.
El Rosa, por el momento, se aseguró de competir en tres campeonatos. En breve, tiene el desafío de los Playoffs de la Copa Entre Ríos. Además, luego comenzará la correspondiente Liga Paranaense y la novedad del año: La Interliga, competencia que enfrenta a los de la ciudad contra diferentes equipos de Paraná Campaña.
La flamante entrenadora, Patricia Moyano, dialogó con la prensa de la Liga Paranaense y manifestó su perspectiva acerca de sus dirigidas. Primeramente, se refirió al encuentro ante Palermo. “Vinimos haciendo una mini pretemporada, entonces la conclusión del partido es que nos sirvió como práctica y significa un alargue para las chicas. Queremos llegar aptas para el sábado y ver qué pasa con el encuentro”.
Respecto a los puntos altos en los que Arenas se destaca, describió: “Tenemos buenas jugadoras, que tienen un estado físico potente. No nos conviene ir al choque, sino ir con pelota dominada y repartir más rápido, cosa de que no tengamos que pelear físicamente con las chicas de San Marcial, porque tienen tres buenas jugadoras y utilizan más el espacio”.
El próximo fin de semana tendrán el primer desafío. El sábado 21 desde las 20 horas, Arenas recibe en cancha de Don Bosco a San Marcial de Concepción del Uruguay. Consultada por el planteo a utilizar ante el difícil rival en Cuartos de Final, Moyano explicó: “Arenas va a contrarrestar el espacio grande y amplio de la cancha. Vamos a achicar el espacio, marcar nuestro terreno y hacer jugar la ley del offside, llegando al área con pelota dominada”.
Por último, hizo énfasis en las más jóvenes, que se han incorporado a los entrenamientos de las mayores y este año, además, tendrán su propio torneo en su división. “Las juveniles que han tenido lugar, son siete u ocho jugadoras de la Sub-16. Las llamé hace tres semanas, para ir sumándose y que se vayan fogueando. Hay que terminar la Copa y comenzar la Interliga. Que se queden tranquilas, porque van a jugar y empezarán a adaptarse al juego de primera”, concluyó.
El presente del Sangre y Luto. En tanto, el DT de Palermo Lucas Giagnorio, también se refirió a la performance que demostró y tiene para demostrar su plantel, además de contar la idea respecto de los proyectos trazados no sólo para el año, sino para el fútbol femenino en el club.
Es el segundo periodo anual en el que Giagnorio está al frente del equipo y aclaró, que si bien los objetivos no fueron a corto plazo, aun así han logrado conseguir buenos resultados y ser protagonistas. “Nosotros arrancamos con este proyecto el año pasado y se armó una buena base. Lo dije el primer día que vine acá a las chicas, que esto iba a ser duro y que la Liga de Paraná es bastante competitiva. Hay equipos fuertes y lo sabemos. Nos armamos y trabajamos con lo que tenemos, tratamos de pelearla. Trabajamos día a día y sabemos que quizás no íbamos a salir campeones, pero íbamos a pelear hasta el final”, aseveró.
El trabajo serio surtió efectos rápidamente y los puntos obtenidos por el club, le permitieron acceder a la máxima competencia provincial en la temporada 2022-2023. Si bien no lograron acceder a la próxima instancia, las sensaciones fueron placenteras. “Por suerte el año pasado se nos dio de pelear entre los grandes equipos de Liga, nos pudimos medir y nos fue bastante bien. Terminamos jugando Copa Entre Ríos, que no nos fue tan mal y ahora tenemos esto que se viene, contra los clubes de Paraná Campaña”, precisó.
En la misma línea, agregó: “Más allá de los resultados, fuimos bien con lo que teníamos, con lo que habíamos armado. Fue una buena experiencia para las chicas, para que vean que trabajando, todo se puede”.
Respecto a los objetivos de cara al futuro, dijo: “El propósito es la Liga. Esto es un proceso, en un año no vamos a lograr mucho, es algo de cuatro o cinco años, pero si lo queremos lograr, tenemos que estar todos unidos y trabajar de la mejor manera. Vamos a tratar de pelear y sacar los puntos necesarios para ver si se puede clasificar para la próxima Copa. Vamos a dejar todo”, afirmó.
Para cerrar, dejó en claro su meta personal y el deseo de dejar una gran base para aportar al fútbol femenino en la institución. “Cuando llegué acá, vine por un sueño. Era pelear y estar contra los mejores, y se dio lo más rápido posible. Nos sirvió de experiencia. Ahora estamos de vuelta metidos, inculcando a las chicas que todo se puede”.