Perla Luz González de Falcón tiene 88 años y mantiene intactas las ganas con las que en 1959 llegó a la Farmacia Moyano. Lo hizo de la mano de su esposo Edgardo, dispuesta a encarar la elaboración de medicamentos. Una vida dedicada al servicio de la población en el área de la salud, atendiendo demandas, evacuando dudas, aconsejando y enseñando desde el mostrador de la tradicional farmacia, ubicada en la esquina de 25 de Mayo y 9 de Julio de Paraná. Actualmente, Perla trabaja en el laboratorio, y allí recibió a MUY.
Gabriela Gómez del Río / [email protected]
Perla de Falcón hace 66 años que es farmacéutica y se desempeña en la Farmacia Moyano, que adquirió la familia de su esposo en 1958. Comenta que la farmacia tiene un lema: “El medicamento es un bien social”, reconocido por la Organización Mundial de la Salud y creado por el farmacéutico argentino Antonio Somaini, quien consideraba que la salud es un derecho y en consecuencia el medicamento no puede ser una mercancía y debe estar garantizado el acceso a todas las personas sin distinción social.
En diálogo con MUY, Perla contó que con su esposo Edgardo, desde la época de estudiantes querían dedicarse a la elaboración de productos en el laboratorio, y que las crisis económicas que sufrió el país llevaron a que esto se concrete, buscando abaratar los precios de los medicamentos para que la gente pudiera comprarlos. Aún hoy, Perla sigue cumpliendo con esta tarea y todas las siestas concurre al laboratorio para dar respuestas a las demandas que recibe la farmacia. “Para mí, es una pasión esto”, afirmó.
-¿Cómo y cuándo surgió la idea de la preparación de medicamentos?
-Desde la época de estudiantes, con mi esposo siempre proyectamos encarar la función farmacéutica desde una de las tantas incumbencias que tiene esta profesión que es la de hacer productos elaborados en nuestro laboratorio. De esa manera, sin proponérnoslo la vida nos fue llevando hacia solucionar un montón de problemas que tuvo nuestra sociedad en distintos momentos de crisis económicas.
-¿Con la elaboración propia se pretendía, entre otras cosas, abaratar los precios de los medicamentos?
-Claro, en 1975 tuvimos una crisis muy grande al punto que las mutuales casi no funcionaban y la gente dejaba de tomar los medicamentos porque no podía comprarlos. Esto a nosotros nos conmovió demasiado, entonces empezamos a hacer con productos derivados de las plantas de la región, por ejemplo, jarabe anticatarrales y otros productos que podían salvar momentáneamente la situación. Lo mismo ocurrió en el 2001, cuando también la crisis económica que tuvo nuestro país arrastró a todos los sectores. Entonces con mi marido decidimos encarar esto de lleno, y para eso tuvimos que comprar ciertas drogas.
Lo que siempre hicimos también para paliar necesidades de la gente son productos de higiene, como los champús, jabones líquidos para manos y para duchas que previenen enfermedades. El jabón en pan forma ranuras que están llenas de salmonellas, en cambio el jabón líquido evita ese problema.
-¿Los medicamentos de elaboración propia contemplan situaciones particulares?
-El medicamento industrial ha llegado a un gran avance en lo tecnológico y en lo terapéutico. Sin embargo, no contempla situaciones individuales: pacientes pediátricos desde neonatos hasta los 10 años, ni a pacientes adultos con patologías que requieren dosis y formas farmacéuticas adecuadas. Pacientes oncológicos que necesitan cuidados paliativos para mejorar su calidad de vida, solucionan ciertas carencias terapéuticas a través de las fórmulas magistrales que elaboramos en nuestro laboratorio.
Nosotros elaboramos formulaciones específicas, con dosificación y forma farmacéutica adaptada a cada individuo. Tenemos casos de niños recién nacidos con patologías antes no detectadas, como insuficiencias renales, cardiológicas, respiratorias, con déficit de sodio, calcio o potasio. Resolvemos esas patologías que antes eran mortales, a través de las fórmulas magistrales.
Responsabilidad y fórmulas exclusivas
“Asumimos a diario la responsabilidad de la preparación de fórmulas magistrales para individuos que van a ser trasplantados, y una vez trasplantados seguimos elaborando las fórmulas específicas para la nueva situación del paciente, que no existen en el mercado, y que son prescriptas exclusivamente para ellos”, afirmó Perla a MUY.
Luego, añadió: “Otra de nuestras tareas a nivel formulaciones magistrales, es la atención de recetas magistrales formuladas en exclusividad para pacientes, que por lo general son niños, con Enfermedades Raras o Poco Frecuentes, para los que la industria no elabora medicamentos. Esos medicamentos reciben el nombre de Medicamentos Huérfanos. En nuestro país existe una población del 4 al 6% de pacientes con Enfermedades Poco Frecuentes. Nuestra provincia no escapa a esa problemática”.
Por otra parte, señaló que “con mucha frecuencia los pacientes externados de Hospitales de Niños como el Garrahan o Gutiérrez, así como el Austral de Buenos Aires continúan los tratamientos con medicamentos magistrales haciéndonos llegar las recetas a nuestra farmacia”.
-¿Podría decirse que realizan una labor personalizada en la preparación de medicamentos?
-Los médicos que atienden adultos que son especialistas en determinadas patologías, con frecuencia se encuentran con la problemática de la necesidad del medicamento individualizado: dosis o formas farmacéuticas que no fabrica la industria. La fórmula magistral resuelve estos problemas.
Tengo que destacar que este trabajo, de absoluta responsabilidad, podemos realizarlo en nuestra farmacia porque me acompaña un equipo de farmacéuticos muy comprometido en esta labor. Ellos son los farmacéuticos Alicia Falcón, Gustavo Perren y Silvia Suares.
Una historia desde las aulas
Perla y Edgardo Falcón se conocieron en Rosario, cuando eran estudiantes de Farmacia, allí comenzó esta historia de amor que se extendió e hizo que esta jovencita santafesina nacida en Vera, una vez finalizados los estudios se radicara en Paraná.
Perla afirma: “Los farmacéuticos somos agentes esenciales en el área de la salud y estamos permanentemente al servicio de la población. Somos especialistas en medicamentos y tenemos bajo nuestra responsabilidad asegurar que ningún individuo de nuestro ámbito quede excluido de la atención sanitaria a la que tiene derecho. Respondemos a nuestro deber ciudadano utilizando los conocimientos y la incumbencia que nos otorgó la Universidad, como herramientas poderosas que evite toda orfandad ante medicamentos inaccesibles o inexistentes”.
Estudio permanente
“Logramos llegar a la obtención de medicamentos al alcance de todos, seguros, garantidos y eficaces, a través de estudiar permanentemente, a participar de cursos y congresos nacionales e internacionales y a una relación estrecha con colegas especializados de nuestro país y del exterior”, destacó Perla.
Por otra parte, indicó que “el Colegio de Farmacéuticos de Entre Ríos ha sido y es un gran apoyo para nosotros, en todas nuestras iniciativas de divulgación de nuestros conocimientos científicos. Dimos durante cuatro años talleres de actualización profesional en preparaciones magistrales a colegas de nuestra provincia, de Chaco, Santa Fe, Rosario, Córdoba y sur de Buenos Aires. También se sumaron a algunas de nuestras exposiciones colegas de España y Ecuador”.
-¿Qué hubiera sido si no se hubiera dedicado a la farmacia?
-Mi verdadera vocación es la docencia, vocación que siempre ejercí porque siempre hice docencia en el mostrador. Di los cursos de formulación magistral en el Colegio de Farmacéuticos, dentro de todo yo cumplí con esa vocación.
Consejos
Para finalizar, a modo de consejo, Perla sugirió: “Siempre tener en cuenta las reglas de higiene, siempre hay que buscar la prevención y ante el menor atisbo de cualquier enfermedad, recurrir inmediatamente al médico. No dejar que la enfermedad evolucione e ir al médico cuando ya está instalada, cuántas vidas se salvarían si la gente fuera inmediatamente el médico”.
“En cuanto a nosotros, tienen que saber que siempre en la farmacia que funciona los 365 días del año, las 24 horas día, siempre van a encontrar un farmacéutico a quien consultar en lo que se refiere a algún medicamente o alguna enfermedad. La farmacia es uno de los lugares más próximos que tiene la población para consultar, siempre van a encontrar en el farmacéutico una orientación correcta hacia lo que deben hacer”.
Normas de Buenas Prácticas en Farmacia
Perla mostró a MUY los libros Códex I y II y explicó: “Redactamos los Códex I y II donde están descriptas las Normas de Buenas Prácticas en Farmacia, donde se establece la unificación de metodología de preparaciones magistrales en general y de uso pediátrico en particular. Estos Códex están aprobados por Resolución por el Ministerio de Salud Pública de Entre Ríos. Esto significa que nuestras normativas volcadas en esos Códex forman parte de la Legislación Farmacéutica de la Provincia de Entre Ríos.
Estas publicaciones contienen los ingredientes, la explicación, la técnica de preparación, cómo se lo receta y cómo hay que observar la droga. Además de la bibliografía y la información que tiene que informar el farmacéutico al paciente.
Datos
Su nombre completo es Perla Luz González de Falcón, nació el 23 de septiembre de 1933 en Santa Fe. Estudió Farmacia en Rosario, donde lo conoció a su esposo, Edgardo Falcón (fallecido en 1999). “Soy más entrerriana que santafesina porque vine a los 25 años, cuando me casé me vine directamente a la Farmacia Moyano. El con su familia compraron la farmacia, nos casamos y esta señora empezó a trabajar acá, -dice entre risas. Esta farmacia es de 1924, faltan dos años para los 100”.
Tiene dos hijas: Alicia, farmacéutica; y Analía, abogada. Sus nietos: Agustina, Beltrán, Lucía, Sebastián y Rocío (fallecida).
Hobbys: jugar al tenis y natación. “Siempre llevé vida de deportista, mi marido y mis hijas también, vivíamos en el club Estudiantes. Deporte, estudio, trabajo, familia esa ha sido la vida”, dijo a modo de resumen.
Para destacar
– Las Flores de Bach: “Trabajé mucho con las flores de Bach, ayudan muchísimo en la parte emocional. Siempre hay preocupaciones, y mucha gente encontró un paliativo en esto, que son productos naturales, totalmente inocuos, que ejercen una importante acción a nivel emocional».
– Pandemia de Covid 19: el medicamento más pedido en la farmacia fueron las gotas para recuperar el olfato y algunas vitaminas. “Durante la pandemia se trabajó al pie del cañón, la gente estaba muy mal”.
– Tiempos de aislamiento: “Hice folletos para las farmacias y di dos cursos virtuales importantes, antiséptico y desinfectantes para que la gente supiera usarlos, y el otro fue de farmacología y estabilidad de uso oral en pediatría, en el que se anotó gente del exterior”, recordó».